Metodología para radiografiar el territorio sonoro huertano es el diseño de unas pautas-tutoriales que permiten llevar a cabo un análisis de contexto para la realización del proyecto Huerta Sonora y se basa en la comparación de grabaciones de audio simultáneas en varios puntos del territorio para dar respuesta a hipótesis que intentan desvelar características acústicas de algunas parcelas en función de aspectos físicos de las mismas.
[Vídeo 2_definición de hipótesis] Para ello, primero se plantean cuestiones sobre asuntos del territorio o del ecosistema existente que afectan al servicio que se desea diseñar. Estas hipótesis se concretan en reuniones multidisciplinares con alumnos de titulaciones como Geografía y Ordenación del Territorio, Administración y Dirección de Empresas, Ciencias Ambientales y Arquitectura.
[Vídeo 3_trabajo de grabación nocturna] Una vez consensuadas las cuestiones, se eligen los puntos en el territorio que se van a examinar para dar conclusión a las hipótesis planteadas. Se dispone de tres grabadoras y se colocan de la siguiente manera: una grabadora siempre en el mismo punto, y las otras dos, se reparten en el territorio dependiendo de la cuestión que se quiera analizar. Para la organización del equipo, cada persona se encarga de los tres aparatos los días que se le asignen, y antes del atardecer se instalan en los puntos acordados entre todos para registrar los sonidos durante toda la noche. Al amanecer, esa misma persona u otro compañero las recoge y vacía los audios en una carpeta compartida para que se puedan analizar y sacar conclusiones.
[Vídeos 4, 5 y 6] Para llegar a conclusiones a través de los audios, se diseña un sistema de trabajo en el que agilizar la escucha de la grabación, y así evitar invertir como mínimo el mismo tiempo de grabación en escuchar cada audio. Para ello se usa una combinación de los programas Adobe Audition, Microsoft Excel, Weave, Qgis y Adobe Photoshop.
[Vídeo 4] En Audition, se convierte el sonido a imagen, transformando la frecuencia e intensidad sonora en una imagen de frecuencia espectral. De este modo, se puede ver representanda la frecuencia del sonido en el eje vertical; la intensidad, a través del color; y el tiempo de canto, en el eje horizontal. En estas imágenes (sonoras) aparecen patrones de canto de cada animal, que se repiten siempre con una forma muy similar. Es entonces cuando se aísla cada patrón y se le asigna una especie animal.
[Vídeo 5] En este mismo programa (adobe audition), se cuenta cuanto tiempo suena cada patrón y se escribe en una tabla de Excel, de modo que tendremos anotado cuándo, cuánto y con qué intensidad canta cada animal.
[Vídeo 6] Estos datos se visualizan a través de Qgis y Weave, de los que se extraen gráficos que se superponen en Photoshop para encontrar diferencias sonoras y extraer conclusiones.
Para completar este análisis, se realizan unas jornadas nocturnas de parametrización de valores sonoros con participantes externos al Vivero de Emprendimiento Huertano, llamadas Viaje al Centro de la Huerta [Más información aquí]